martes, 8 de enero de 2013

¨ La tragedia campesina cubana¨




¨ La tragedia campesina cubana¨
Con el nuevo orden agricultor cubano, después de 1959, (que marca una época histórica), la comunidad agrícola cubana debe regirse por estrictas normas que regulan su producción y venta en el territorio nacional.
El Ministerio de la Agricultura, único autorizado y acreditado para intermediar la venta productiva, compromete el éxito o el fracaso de la misma, con su subordinada empresa estatal, conocida como ¨ACOPIO¨, que es la encargada y designada para el comercio con los campesinos, de su producción anual o por cosechas. Pero la misma, no posee competencia planificada de mercado, lo que trae como consecuencia que se traduzca en la imposibilidad de acudir a otra para estos menesteres.
Como ejemplo de esto, puede citarse, una problemática que vivieron los campesinos de la zona habanera de Guira de Melena, de la nueva provincia de Artemisa, que son los encargados (orientados) de abastecer el mercado poblacional capitalino. La producción de algunos de ellos se pudrió en el campo, por la ineficiencia de la empresa ACOPIO, de recoger la misma, cuando ya estuvo lista para ser enviada a los mercados poblacionales de la capital con el objeto de su venta.
No recoger las cosechas a tiempo, tiene sus grandes pérdidas para la comunidad campesina y también para la población que sufre la escasez de alimentos e insumos. La empresa ACOPIO no siempre elabora un plan efectivo para la recogida cosechera, y tampoco se soluciona esta problemática. No es la primera vez que se pudren en los campos. Puede existir una vía ya coordinada, pero la rigidez con que se confeccionó la ley regulatoria, al parecer indica que es preferible que se pudran en los campos, con la afectación que acarrea,  antes de que el campesinado pueda venderlas para sí.
¿Quiénes sufrirán las consecuencias¨
En un país donde los insumos comestibles se han convertido en una angustia ciudadana, esta empresa tiene programada la indemnización, por el incumplimientos de contratos empresarial, pero en la realidad práctica se hace difícil para cualquier campesino ganar cualquier demanda contra esta empresa. El seguro estatal que tiene legislado solo cubre los casos de desastres climatológicos.
La ley establece que debe vender sus productos el propio agricultor directamente en el mercado poblacional, no puede delegar en otra persona. Ni puede hacerlo a través de otra entidad. Debe atender la venta agrícola y encontrarse en su propia finca a la vez.
¿Será eso posible en otras partes del mundo también*


Noraida Romero

“ Los Münzers cubanos ”




“ Los Münzers cubanos ”


A través de la historia de la Iglesia y de los siglos, más de un teólogo y de un sacerdote han disentido de los procesos sociales de sus respectivos países. Por citar tan solo un ejemplo cabría mencionar la participación del  teólogo Thomas Münzer en la revolución campesina en Alemania.
Igualmente, en España, el obispo Acuña es ejecutado como cura guerrillero, por su unión en las luchas con los comuneros de la región de Castilla. Y en América Latina Camilo Torres es ejecutado también, después de hacer público su compromiso con la guerrilla colombiana, el 15 de febrero de 1966.
Posteriormente, en el siglo XX, dentro del marco de la Iglesia latina puede decirse que la opción guerrillera constituyó una oposición política, que optaron no pocos sacerdotes y teólogos.
En más de una ocasión, las autoridades eclesiásticas se han empeñado en reprimir y controlar toda forma de disidencia dentro de las filas de los consagrados, pero párrocos como Domingo, Manuel y José Antonio, de Aragón y Manuel Pérez Martínez, de Zaragoza en España, escogieron la opción guerrillera inclusive de un modo internacionalista.
Disintiendo de los principios de la política social de la Iglesia, en el llamado a los cristianos, la lucha contra gobiernos tiránicos, que sirven a minorías privilegiadas, subyugando a los pueblos, convirtió al párroco cubano Eduardo (Lalo) Sardiñas en cura guerrillero, llegando a ostentar el grado de comandante en la lucha opositora de aquel entonces.
En la actualidad de Cuba, el fraile José Conrado, oficiador de la Iglesia Santa Teresita del Niño Jesús, en la oriental provincia cubana de Santiago de Cuba, se ha dado a la tarea de no permitir el  maltrato físico a la integridad de la vida de las fieles que conforman el movimiento femenino disidente, conocido como Damas de Blanco, que asisten a esta iglesia, para tomar el alimento espiritual. La posición política del Padre Conrado, le ha valido reconocimientos sociales y políticos por parte de organizaciones opositoras al régimen. Su postura férreamente firme ha sido digna de destacar, ante la convulsión del proceso de la sociedad cubana de hoy.
En el marco teológico protestante de Cuba, el Pastor Omar Gude Pérez (Pastor Apostólico) y Mario Félix Lleonart (Pastor Bautista en Santa Clara), asimismo han optado por asumir una actitud contestataria y de compromiso con su pueblo y con su lucha.
Otros como Antonio Rodríguez Estrada, César Serrano Palacios, Marilis Acosta y otros, se dieron a la tarea de fundar el 10 de abril del 2012, la organización cívica religiosa “ Pastores por el Cambio”, que en su trabajo comunitario, no exento de la doctrina de la Iglesia, (como Iglesia de los pobres), predican en las calles, fundamentalmente de la ciudad de Bayamo, donde surge esta organización, que desafía y desmiembra al movimiento pastoral cubano, emergiendo como una alternativa  socialcristiana, promoviendo un cambio en el país a favor del cristianismo en la actualidad de la isla.
Este activismo religioso tiene un precio cívico. Las calles de la ciudad oriental de Bayamo, en la provincia granmense, son asediadas por la policía política en cuanto a este tema. No todos los pastores, ministros, teólogos y hermanos cristianos desde la perspectiva del evangelio, están de acuerdo con el control que ejerce el Departamento del Estado, que atiende la señora Caridad Diego para la observación e investigación de las Iglesias y Cultos en el país.


Noraida Romero